«Acaba el invierno, brota la primavera. Y la Tierra, tras el verano, promete y manará vino».

Terminan los fríos y los campos nevados protegen las esencias y abrevan las cepas para brotar en breves días en una prometedora primavera cuyo estallido floral será una promesa y preludio de la casi otoñal cosecha, allá cuando entre santa Rosa, 23 de agosto, y san Mateo, 21 de setiembre, y ocurra el milagro anual de la venda mía del nuevo vino.
En Bodegas COMENGE, en la Ribera del Duero, es aún, pues, época de quietud, de serenas y hasta níveas estampas, de campos de viñedos (de tempranillo, verdejo y Albillos) callados, descansando y cogiendo fuerza para dar su do de pecho otoñal.

Y por supuesto en las tranquilas y serenas cavas las barricas y botellas madura y afina su tesoro más preciado, sus vinos de anteriores cosechas, con paciencia, técnica y el tiempo previsto y necesario para otorgar las esencias y virtudes de los vinos de la familia COMENGE que es el objetivo, tesón y deseo de la familia COMENGE, des 1999, cuando don Jaime Comenge, inició tan bonita, creativa y fenomenal labor de elaborar grandes vinos en su tierra.
Antes de esa alegre y anhelada vendimia, después de este gélido invierno y de una colorida da y floral primavera, habrá que pasar los tórridos veranos, decía, en las que las uvas, antes flores, se crean y crecen hasta su óptimo punto de maduración, idóneo para recogerla, con mimo, y llevarlas a los lagares de COMENGE, para su conversión mágica en el nuevo vino.

Así año tras año, sin prisas y sin apenas pausas, COMENGE, cultiva, cuida, recolecta, elabora y guarda sus vinos para hacernos una vida más feliz con su plácida degustación controlada.
Y por supuesto en COMENGE se cuida del paisaje y paisanaje, en una total armonía con el medio ambiente, su sostenibilidad y cuidando de los suyos, sus gentes, su equipo que, como en una gran familia, se sienten artífices y protagonistas de estos magníficos vinos Curiel del Duero, a unos pocos kilómetros de Pesquera y Peñafiel, en pleno corazón de la Ribera del Duero, que elabora Bodegas COMENGE.
Vinos sanos, naturales, hechos con mimo y de reconocido respeto para los más expertos conocedores y hasta a veces culto por muchos aficionados expertos.
Y no hay vinos mejores ni peores, ni grandes ni menores, toda la gama está cuidada con sumo esmero y sólo las diferencia su destino, su perfil de público y su momento de utilidad y consumo.
COMENGE, es, ya hoy, un valor seguro entre los grandes vinos de la D. O. Ribera del Duero. Conózcalos, disfruté de ellos y medite sobre el lento y natural proceso del terruño a su copa.

Rafael Rincón JM
Camino del Castillo, s/n
Teléfono: 983 88 03 63
47316 Curiel de Duero, Valladolid.
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