por Celso Vázquez Manzanares
Este domingo 15 de septiembre Melide en Galicia fue la sartén de España. No, no era por el calor -que también-, sino porque, literalmente, no había sartén en toda la piel de toro que pudiese competir con la de Melide, con un diámetro sin par y lista para dar de comer a todo el municipio con el reto de conseguir la tortilla de patata y huevo campero más grande de la historia.
Esta tortilla de récord fue planteada en la localidad gallega y el objetivo se cumplió para alegría de los miles de curiosos que, con el tenedor en la mano, esperaban alcanzar esa meta e hincarle el diente a un plato de leyenda.
El monstruo pesaba nada menos que 8 toneladas que acabaron en el plato de todos los que se acercaron a ver esta obra de arte de la gastronomía nacional y para la que hicieron falta 15.000 huevos, 1.700 kilos de patatas, 300 litros de aceite y 30 kilos de sal. Para el giro de la sartén hicieron falta 140 brazos, los de los 70 esforzados levantadores que le dieron la vuelta a la tortilla tras 4 horas de trabajo entre fogones.
Entre debates sobre si debe llevar cebolla o no y los que discuten si está mejor con chorizo o con atún, lo cierto es que todos quedaron contentos con el sabor, con el color y con la textura de este mazacote que, desde hoy, tiene el honor de haber sido la más grande de su categoría al dejar en cajones más bajos de este pódium a Vitoria y Bogotá.
