A ver, si Esau se vendió por unas divinas lentejas…
Biblicas, baratas, humildes,… muy ricas, nutritivas, saludables, tonificantes, económicas…un gran alimento.
Desde que Esaú trocara su plato de simples lentejas, estas leguminosas han estado en la dieta del humano, acompañándole a través de su agitada historia, manteniéndose como símbolo de referencia de comida en abundancia, de la despensa, y están en el refranero español y europeo desde hace milenios…
De varias clases y tipos. Negras, castellanas, redondas, pardinas…, viudas o con acompañamientos, estofadas, en puré, en ensaladas, como guarnición….
Siempre en los menús enkf las casas de comidas de casi toda Europa meridional y central, así como en el Medio Oriente y Norte de África y en Latinoamérica.
Si fuesen caras serían consideradas como bocado exquisito y muy valorado.
Y empecemos ¿qué es? ¿cómo es?
Lens culinaris, la lenteja es una planta anual herbácea de la familia fabaceae, con tallos de 30 a 40 cm, endebles, ramosos y estriados, hojas oblongas, estípulas lanceoladas, zarcillos poco arrollados y flores blancas y moradas, sobre un pedúnculo axilar, y fruto en vaina pequeña, con dos o tres semillas pardas en forma de disco de medio centímetro de diámetro, aproximadamente.
Etimologia
La palabra lentes proviene del latín lens, lentis, que significa «lenteja».
La analogía está motivada por el hecho de que una semilla de lenteja tiene una curvatura similar a la de una lente biconvexa.
Producción y geografía
Es un grano relativamente tolerante a la sequía, y prospera en muchos ambientes. Cerca de un tercio de su producción es de India, y se consume en el mercado interno. Los mayores consumidores se encuentran en Asia, el norte de África, Europa Occidental y parte de Latinoamérica.
En América se encuentra el mayor exportador, Canadá y su región más importante de producción es Saskatchewan. La región Palouse del oriente de Washington e Idaho Panhandle, con su centro comercial en Pullman (Washington), constituyen la mayor región productora de los Estados Unidos.
Los principales importadores son Argelia y Egipto, le siguen Bangladés, Sri Lanka, India y Pakistán. En Europa destacan España, Francia, Italia y Alemania. Y por último, en Latinoamérica, los países integrantes de la Comunidad Andina y Brasil importan alrededor de 140.000 toneladas.
La FAO reportó la producción mundial de lentejas de 2008 en 2,82 millones de toneladas en India (29,0 %), Canadá (24,5 %), Turquía (14.5 %), Australia (5,7 %), Estados Unidos (4 %) y China (3,9 %), que sostienen el 81 % del total global.
Cualidades nutricionales
La lenteja es un alimento con una alta concentración de nutrientes.
Los hidratos de carbono son los más abundantes y están formados fundamentalmente por almidón. Sus proteínas vegetales, aunque en buena cantidad, son incompletas, puesto que son deficitarias en metionina (un ácido esencial).
No obstante, si se combinan las lentejas con cereales como la avena o el maíz, ricos en dicho aminoácido, se convierten en proteínas de alto valor biológico, equiparable a las que aportan los alimentos de origen animal.
El contenido en lípidos es muy bajo. El aporte de fibra, aunque importante, es también inferior al de otras leguminosas.
Una característica común a todas las leguminosas es la presencia en las raíces de unos nódulos que encierran bacterias del género Rhizobium, capaces de transformar el nitrógeno atmosférico, que las plantas no pueden utilizar, en nitrógeno orgánico (nitrato), que sí pueden utilizar. Por ello, las leguminosas son ricas en proteínas, nutriente que contiene moléculas de nitrógeno en su composición. A menudo se plantan legumbres con el fin de reponerlo.
Propiedades como alimento funcional
Existen trabajos de investigación científica que muestran alguna evidencia experimental de que las lentejas fermentadas en ciertas condiciones tienen propiedades frente a la hipertensión arterial.
Y ya sabe para algunos la vida vale un plato de buenas lentejas.
Rafael Rincón JM