José Ignacio Millán Valderrama, fundador de la firma oleícola Aceites Valderrama, ha fallecido este sábado 17 de febrero de 2024, con 82 años. José Ignacio, cordobés de nacimiento y madrileño de adopción, levantó esta empresa hace más de veinte años tras dedicarse durante treinta y uno al mundo de la ingeniería. Visionario nato, supo prever que el futuro del sector estaba en los aceites de máxima calidad y en la alta gastronomía, por lo que decidió aplicar todos sus conocimientos técnicos en obtener los mejores aceites de oliva virgen extra del mercado.
De familia de olivareros, este Ingeniero de Telecomunicaciones deja su actividad profesional en el año 2000 para dedicarse de pleno a consolidar su sueño, «hacer el mejor aceite de oliva virgen extra». Para ello, amplió la finca familiar de Montilla, en la que se fabricaba aceite desde 1920 y adquirió una segunda en La Pueblanueva, Toledo. Gracias a sus conocimientos tecnológicos, implementó un revolucionario sistema de producción en frío con el que consiguió hacer aceites que, en menos de una hora, llegaban «del olivo a la mesa».
Trabajador infatigable, consiguió expandir la fama de Aceites Valderrama por todo el orbe hasta que, en 2014 un accidente cerebrovascular le apartó de la primera línea comercial. Desde entonces y hasta su fallecimiento, el presidente y fundador de Aceites Valderrama ha continuado tomando decisiones junto a su mano derecha, el director general de la firma, Miguel Millán. Hoy en día, los más renombrados cocineros de nuestro panorama nacional, como Alberto Chicote, Karlos Argiñano, Paco Roncero, Sacha Hormaechea y un largo etcétera utilizan sus aceites en las cocinas de sus establecimientos. En todo el mundo, son casi un centenar de chefs con estrellas Michelin.
El sector lamenta hoy su triste pérdida.