Desde Brasil un queso del Nuevo Mundo.
El Queijo Minas o Mineiro es un queso elaborado con leche de vaca muy tradicional de la cocina del sudeste brasileño.
Este queso, que ahora hacen miles de pequeños productores, llegó a la región con los exploradores portugueses del siglo XVI. Como otros similares, vino con el ganado bovino, en formatos más o menos grandes, y fue el alimento nutricional proteínico de los esclavos, vaqueros, peones, braceros y menosterosos.
El «Queijo Mineiro» también es conocido como “Queijo Minas” es un queso de leche de vaca semicurado blando y húmedo, con un sabor muy suave y salado y con un toque de limón al paladar. Con el tiempo se vuelve amarillo, con el centro blanco, y desarrolla un sabor más profundo y un leve amargor.
Su nombre proviene, seguramente, del estado de Minas Gerais vecino a el carioca de Río Janeiro. Aunque hoy se hace principalmente desde el sureño Río Grande del Sur, los estados de Santa Catarina, de Paraná, de Sao Paulo, de Río do Janeiro y el mismo de Minas Gerais.
Se comercializa en tres variedades denominadas: Frescal (queso fresco), Meia-cura (semicurado) y Curado (queso curado). Una cuarta variedad se denomina Queijo Padrão (queso estándar) y ha sido elaborado desde hace un decenio, se puede encontrar este queso en casi cualquier tienda de Brasil.
Se comercializa en tres variedades denominadas: Frescal (queso fresco), Meia-cura (semicurado) y Curado (queso curado). Una cuarta variedad se denomina Queijo Padrão (queso estándar) y ha sido elaborado desde hace muy poco, se puede encontrar este queso en casi cualquier tienda de Brasil.
Carácterísticas principales:
De leche de vaca pasteurizada, de pasta semi blanda, sin corteza, madurado sólo 4-10 días los frescos hasta varios meses los curados, sabor suave, zona de producción Minas Gerais, Brasil.
El queso tiene varias formas, aunque la más frecuente es la cilíndrica de 9 cm. de diámetro y 5 cm. de alto, su peso varia entre 800g a 1,2 kilos.
Los quesos Frescos (como su nombre indica) se sirven muy frescos, unos 4-10 días después de su preparación, siendo blanco y tierno. El buen Frescal debe ser jugoso, suave, ligeramente granulado (en lugar de gomoso), con un sabor suave.
La maduración puede llegar a varios meses si se deja curar. El queso solía madurar naturalmente al aire libre o, con mucha menos frecuencia, se secaba con el calor de una olla.
El queso curado está listo para el consumo cuando la humedad del suero se haya evaporado y el queso se ha consolidado y ha adquirido una tonalidad amarillenta. Un buen queso curado debe tener una base blanca, estar lleno de ojos, motivados por pequeñas burbujas de aire que se forman al compactarse la cuajada, su textura ha de ser un poco más granulada que Frescal y con un sabor más fuerte, tendiendo a amargo.
Gastronomía
Era el alimento básico de las familias en la región montañosa de Minas Gerais, y actualmente es consumido en casi todo el Brasil.
Tómelo con pan de miga tipo viena, también se usa tradicionalmente para rellenar el típico “Pão de Queijo” (pan de queso) que consiste en una especie de bizcocho o pan hecho con yuca, huevos, sal y manteca de cerdo, relleno de queso. O para rellenar feijoas.
No es bueno para cocinar, excepto con carne de res o de cerdo (ayuda a cambiar el sabor de la misma). Puede ser utilizado para hacer sándwiches.
Rafael Rincón JM
Desde un texto de Marti Vicente en Mundoquesos.com