El año que viene este entrañable y quizá el más agradable, singular, canallita, sibarita de todo Madrid cumple 50 años y el «joven» Sacha celebrará las bodas de Oro del sueño hecho realidad, en1972, por sus padres, Pitila y Carlos, una pareja única de dos grandes personas libres, gourmets, bohemios, cultos y sibaritas españoles de los sesenta y 70.
Por eso les dejo esta nota de hace unos años donde intentaba explicar este fenómeno…
SACHA, EL CENÁCULO DIEZ

En el antigo barrio de “Corea”, después “Costa Fleming” hoy una de las zonas más vivas, residenciales y comerciales de Madrid la pareja formada por Carlos Hormaechea, catalán de vascona ascendencia y Pitila Mosquera gallega profunda, de armas tomar, abrieron el templo más representativo de la escasa burguesia cosmopolita, inquieta, progre, educada e inquieta en el gris ambiente de 1972: Sacha.
Aportaron nuevos aires a la escasa oferta gourmet existente con una decoración clásica y “mignone” al estilo de los bistrots de moda en París pero con estilo propio muy personal. Platos algo atrevidos entonces con otros de raigambre tradicional en la cocina de sus familias deslumbraron al naciente público gourmet. En un marco exquisito, sencillo, cuidado, con una decoración y estilo muy personal.

Su hijo Sacha comenzó entre ollas y manteles en el 84 y pasó a paso tomo las riendas una vez desaparecida Pitila, carismática alma mater de artistas, funámbulos y transgresores jóvenes de los 70-80. Sacha descubre entonces un mundo acorde a su personalidad, fogosa, intrépida, sensible como artistav( es un excelente fotógrafo ) y con las raices bien entendidas evoluciona su cocina a los nuevos tiempos de global oferta pero siempre con una solvencia y calidad demostrada, sin aventuras fatuas, con el peso del buen oficio y el áncora de la experiencia.
Cuando desparece la gran Pitila, cuenta Sacha que muchos le recomendaron modernizarse el bistrot y lo cambiara actualizando decoración u oferta gastronómica. Pero él pensaba y contestaba a todos que » los consejos deberían venir al menos con el 50% de lo recomendado…»
Buena prueba de ello es el mantenimiento de recetas presentes desde la fundación como las ostras escabechadas o fritas, o las clásicas y sempiternas lentejas de los lunes, o las celebérrimas filloas “brujas” de Pitila y la tarta de manzana tradicional.
Hoy día su carta es una miscelánea de platos de siempre, otros consolidados y creativas novedades algunas con productos exóticos. Disfruten de ello: Anchoas del Cantábrico con aceite virgen, Falsa Lasaña de Erizo de mar, Tuétano asado a la antigua, Tartare de carne (en tiempos de matanza de res brava), Ventresca de Atún Rojo al Ibérico, Raya templada con Salpicón, Ragoût de Calamares, una nueva Vaca a la Moda o como última novedad unas Zamburiñas en Lima con Ají del Amazonas, salen con sugerente y atractiva presentación de los fogones con el propio Sacha y Carmelo Martín al frente.







Una nutrida y sofístificada bodega de grandes vinos y grandes alcoholes seleccionados acordes a la exquisita sensibilidad de la casa, por Sacha y Carmelo Martín, sumiller y maître que con mano diestra dirige un veterano equipo atento y eficaz.
El recoleto local con unas doce mesas está situado en un pasadizo jardin donde cuenta en temporada con una acogedora y reservada terraza. Lo llena a diario un público selecto, entendido con caras conocidas de la más palpitante actualidad. El ambiente es tranquilo y rezuma civismo y bonhomia, donde las exquisiteces van acompañadas de interesantes y privadas conversaciones. Es indispensable reservar la mesa.
Si su idea es comer o cenar en un encantador ambiente en agradable compañía, no lo dude Sacha es su sitio.
Rafael Rincón JM
Restaurante SACHA
C. de Juan Hurtado de Mendoza, 11, Posterior,
28036 Madrid
Teléfono: 913 45 59 52