por Celso Vázquez Manzanares
El viernes por la mañana, fue el día en el que la Academia de Gastronomía para Ibiza y Formentera celebró la cuarta edición de sus premios anuales, un reconocimiento al talento de restauradores y productores locales.
La ceremonia, contó con la presencia del presidente del Consell, los alcaldes y alcaldesas de la isla, así como la directora general de Cultura del Govern Balear, fue un momento para resaltar la excelencia y el compromiso del sector gastronómico local.
Tras un emotivo inicio con un minuto de silencio en memoria de las víctimas del reciente derrumbe en un local de la Playa de Palma, Luis Suárez de Lezo, presidente de la Real Academia de Gastronomía, elogió el arduo trabajo de los profesionales del sector y su contribución a la felicidad de la comunidad.
Durante el evento, se otorgaron diez premios, cada uno representando un aspecto distintivo de la gastronomía local.
PREMIADOS
Durante la ceremonia, se entregó el premio a las mejores tapas a Es Cantonet, un local en la ciudad de Ibiza que ofrece una variedad de tapas tradicionales del recetario ibicenco. El premio al chiringuito tradicional fue para Ses Boques, un lugar junto al mar que ha ofrecido cocina local vinculada al Mediterráneo durante más de cuatro décadas.
El restaurante Ca N’Alfredo fue galardonado con el premio a la cocina tradicional por su servicio excepcional y su compromiso con el producto local a lo largo de las décadas. Además, se reconoció a Alba Pau con el premio a toda una vida por su trabajo en el restaurante Can Pau, un espacio que ha sido hogar y punto de encuentro en la isla desde 1973.
En esta edición, la Academia quiso destacar el trabajo de la IGP Oli d’Eivissa con el premio al producto local, mientras que el restaurante Can Pujol recibió el premio al mejor restaurante por su enfoque en los productos del mar y su dedicación a la cocina tradicional ibicenca.
Además, se premió la innovación culinaria con José González del restaurante Es Gerret, el concepto gastronómico con Walter Sidoravicius en «Omakase by Walt», y el prestigio gastronómico internacional con Rafa Zafra de Casa Jondal.
Finalmente, se otorgó un premio especial al plato emblemático de la gastronomía de Ibiza: el Bullit de Peix, destacando su importancia en la cocina local y su excepcionalidad en muchos restaurantes de la isla.
Al finalizar la ceremonia, los asistentes tuvieron la oportunidad de disfrutar de una degustación de productos locales, incluyendo embutidos de «porc negre» de Carn and Coop, vinos de Can Rich, y unas croquetas elaboradas especialmente para la ocasión por la cocinera ibicenca Marga Orell.