Un aperitivo singular y ¿exótico? en el barrio de Torrijos…
Les había prometido hace unas semanas, en mi segunda salida tras mi larga pausa sanitaria, hablar algo más de Tempus y su carismático propietario, chef, alma y ‘man for everything’, del que ya hablé someramente en: https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=pfbid02qTBC8pEHvLQg3uXELVpATUDXZop7WeuJRDnWr8Fm8JZTurd6ejzX5DLXUVjJMULzl&id=100063482803399
Y hoy quiero explicarles como fue lo probado y comido.
Tempus, es, como dije, una curiosa y moderna taberna con matices cosmopolitas que se reflejan en su oferta y hacen «viajar» al visitante por y desde el más exótico Mediterráneo, Líbano y Medio Oriente, a las singulares y sabrosas cocinas multiculturales de Lima y el extenso y policromado Perú. Les garantizo que es una experiencia muy agradable y repetible.
El artífice y creador es, ‘Beto’, Luis Alberto Kouri Bumachar, un epicúreo y viajado abogado, peruano de origen libanés, en su sangre se fusionan líquidos vitales del Pacífico y del Mediterráneo, que por su profesión y gran viajero con muchas y variadas estancias en España, donde sucumbió a su forma de vivir y sus seductores aromas y sabores.
Decidido, en 2019, a instalarse aquí, arribó a España en 2019 y abrió justo antes de la pandemia y lo ha tenido medio abierto, medio cerrado, hasta que hace unos meses, Tempus Gastrobar, empezó su decisiva apertura.
Siendo inquieto y deseoso de poder ampliar esta primera odisea hostelera gastronómica, con un local más amplio y acordé a sus inquietudes culinarias, en junio acaba de empezar otra haciéndose con un local del mismo distrito, Salamanca, en el barrio más señorial y financiero de Jorge Juan-Velazquez. Nada más y nada menos. Del cual les hablaremos en cuanto adapte su oferta, instalación y carta.
Sito, Tempus, en pleno barrio de Lista-Torrijos (don Ramón de la Cruz, 48) es un gastrobar sencillo, algo «cool», con un aspecto exterior de cafetería elegante, con bonitos detalles como el soberbio reloj colgante, exterior, que recuerda al de una estación, como indicando está etapa de nuestro viaje gastronómico. En él, siempre, el toque carismático de Beto, que se nota y siente en cada trago o bocado, sea ya peruano o ya mediterráneo.
Acudimos cinco amigos de la comunicación gastronómica con ‘tablas’ suficientes para el lúdico experimento (Concha Crespo, Rosa Román, Alfredo Franco, Martín Mucha y yo mismo) y ésta fue la experiencia.
-Causa a la limeña: en delicados y apetitosos bocaditos, muy ricos, equilibrio de sabores y respeto absoluto a la tradicional receta.
– Mejillones, «choros», a la «chalaca». Plato muy popular, originario de El Callao, el gran puerto de Lima. Espléndidos mejillones, en este caso gallegos, terciados, bien de punto de cocción, jugosos y buena textura, con su fina sabrosura marina combinada con un aderezo algo picante y adictivo.
– Zamburiñas con salsa de ostión, seta ‘shitake’ y ‘pack choi’ o col china. Muy ricas. Turgentes, friables, complejas de deliciosos sabores exóticos combinados, nos encantaron
– Grana Padano con vinagre balsámico. Para romper la línea peruana, lo que nos habia traído, una buena cuña del famoso y reconocido queso parmesano con el refrescante toque ácido del néctar de Módena.
– Yucas fritas. Un aperitivo crujiente, de cochura muy bien frita y en buen aceite limpio, manteniéndose tierna la cocida carne del rico tubérculo en el interior. Sustancioso y prudentemente saciante. Rico y divertido.
– Rodajas de tomate aliñadas. Buenas, refrescantes y carnosas rodajas. Bien aliñadas con buen aove, quizá un poco insípido el tomate.
– Ceviche clásico de corvina. Tradicional. Bien realizado, con buen corte y pescado, leche de tigre moderada de fuerza y con todos los ingredientes típicos, cebolla roja, maíces (choclo y chanchita serrana), camote (batata), ajíes, jugo lima y cilantro. Muy correcto e ideal en este tiempo.
– Arroz con Pato. Muy típica receta del Perú, con influencia criolla y ‘chaufa’, china peruana. Cocinado como un buen arroz seco mediterráneo, en paella, y una buena dosis de un excelente magret de pato en su punto óptimo de hechura. Estupendo plato. Lleno de matices y seductores aromas e impecable aspecto y… ¡hasta con ‘socarrat’!. Mucho saber coquinario en este arroz magnífico. Con la ración pueden comer tres muy bien. Quizá elevar el tipo de arroz (en Perú suelen usar el arroz largo basmati, si es verdad que lo hacen más caldoso) a uno más glutinoso como el bomba, albufera, senya, jsenra, etc. más en tono con la receta cocinada a la manera mediterránea.
– Lomo Saltado sobre ‘spaguetti’ a la crema de la ‘huancaina’. Otro gran y contundente plato. Muy recomendado para comilones carnívoros. El ‘lomo saltao’ es otra receta de doble influencia china y criolla. Trozos de buena carne de res, saltados al wok con un picadillo de verduras, acompañados por la pasta impregnada de la rica y, ya, tradicional salsa peruana ‘huancaina’.
Hasta aquí todo un festival de exhibición coquinaria peruana.
Para el postre, Beto, nos avisó y sugerió que él nos daría una especialidad de su vecino pastelero, www.mis3gracias.com, que no podía superar. Así que nos trajo el postre de la confitería de justo al lado, ejemplo de buena y solidaria vecindad…que nos dice mucho de su carácter.
– Unos delicados, ligeros y excelentes gofres belgas, coronados de un buen helado.
Para acompañar el postre, nos sorprendió con un vino sauternnes, ‘Sablettes’ del viticultor, Miches Laurent Bodega. Siempre un soberbio acompañante este vino dulce natural que igual armoniza con foie gras, quesos azules o postres. Un acierto.
Para beber, como hacía calor cayeron algunas cervezas peruanas, Cusqueña clásica, después pisco sour, vino blanco albariño Rías Baixas, un gran vino tinto con las carnes el fantástico Teso de la Monja de Marcos Eguren, D.O. Toro.
Todo bien explicado y detallado personalmente por el propio, Beto. Con muy interesante conversación y comentarios sobre lo degustado. Buen tándem de profesionales, bien atentos y pendientes de todo, de Tempus, merece una muy favorable mención meritoria.
Y con ricas pitanzas y acordes bebidas en la mesa y rodeado de buena compañía, fue una comida memorable. Tanto por su calidad y servicio como en interés y amenidad que continuó en compartida tertulia en la terraza hasta bien entrada la tarde.
En ella, Beto, nos explicó su historia, motivaciones y proyectos. Hablamos de potenciar también su cara árabe mediterránea, logrando un rincón de enlace entre Beirut-Lima. Consiguiendo así una oferta original que compendie estas dos zonas de grandes cocinas.
De precios anda equilibrado. Desde luego no puede ser económico pero si barato dada su excelente relación calidad-precio. Precio medio de dos comensales, picando desde 35/45€. y compartiendo platos 80/110 euros, para comer, muy bien
Definitivamente si encontramos cultura, buena gastronomía, conocimientos interesantes, el resultado es casi siempre estupendo, como es el caso.
Recomiendo, claro, el pasarse por allí, pero, para que su vivencia sea aún más satisfactoria, les invito a reservar y si puede hablar directamente con Beto, explicándole que es un lector nuestro, para que coordine un menú a su gusto y pueda atenderlos el mismo. Ganará mucho en la experiencia.
Yo les invito a un tan sugerente viaje sensitivo.
Rafael Rincón JM
Las fotos son mías y algunas de mi amiga y compañera, Rosa Román.
TEMPUS
Don Ramón de la Cruz, 48.
Teléfono: 917 24 27 56
28001 Madrid
Metro: Lista